Drogas y violencias en tiempos de pandemia. Consecuencias y respuestas

Drogas y violencias en tiempos de pandemia. Consecuencias y respuestas

Existe una abundante literatura que ha analizado los efectos de la política de drogas prohibicionista, punitiva y militarista en México, así como las consecuencias inesperadas, los efectos perversos y los riesgos en que coloca a sus ciudadanos. Este libro tiene como trasfondo, precisamente, ese contexto de riesgo, de consecuencias y efectos perversos de la política de drogas en tiempos de COVID-19. En especial, una gran parte de los manuscritos presenta las formas en que las acciones de gobierno y las políticas implementadas durante la pandemia afectaron los accesos a los servicios de salud, de reducción de daños y de suministros de sustancias. Sin duda, uno de los grandes protagonistas es el Estado que a través de sus órganos de persecución protagoniza un conflicto militar que no sólo se ha profundizado en México, sino que es parte de todo un entorno de militarización en América Latina.

En todo caso, junto a los efectos, este libro ofrece una mirada a las respuestas que se articulan desde la sociedad para hacer frente a esos efectos perversos. Sin duda, el COVID-19 también trajo consigo una mejor articulación de las respuestas ciudadanas frente a los riesgos. Vemos así, colectivos de la sociedad civil con programas de reducción de daños en el norte de México, movimientos de protesta como el cannábico en resistencia ante el régimen prohibicionista, o iniciativas comunitarias que ofrecen respuestas –a veces desde el sentido común– frente al consumo problemático de sustancias.

En su conjunto, este volumen ofrece una serie de trabajos con distintas aproximaciones teóricas y metodológicas a los efectos del prohibicionismo, el punitivismo y el militarismo en tiempos pandémicos. En él aparecen distintos actores: la pandemia, el Estado y sus políticas, los usuarios de sustancias, mujeres y madres usuarias, mujeres desplazadas por la violencia, las y los activistas de las políticas de drogas, los colectivos y movimientos sociales, las fuerzas armadas y, por supuesto, el COVID-19 y sus medidas de distanciamiento social.